domingo, 30 de diciembre de 2012

En el parque

Yo no me había fijado nunca. Pero alguien me dijo que en ese parque es interesante desde un punto de vista sociológico (o quizá usó otra palabra). Dice que solo es posible encontrar estas combinaciones: niñxs españolxs al cuidado de sudamericanas, y niñxs extranjerxs al cuidado de españolas.

Es el mismo parque donde hace un par de años una niña que apenas sabía hablar dijo que no quería jugar con uno de mis sobrinos porque (según ella) era negro. Y yo solo me quedé a cuadros, preguntándome cómo se supone que se reacciona ante eso. Eché mucho de menos a su padre, él seguro que hubiera sabido qué decir. Seguramente algo simpático, con su gran sonrisa, y rápidamente tanto la niña como mi sobrino habrían olvidado el incidente y hasta quizá hubieran jugado un rato juntxs. El de la simpatía es un gran recurso, a mí me admira mucho.

Cuando están en Mozambique no les dicen que son negros. Los llaman whities.

Hacer como que el racismo no existe no parece una buena estrategia. Igual que no lo es con el machismo o con la homofobia. En todos los grupos oprimidos tiene más sentido actuar sabiendo que las opresiones existen, para desarrollar mecanismos para defenderse de ellas.

martes, 25 de diciembre de 2012

Regalos

De momento los regalos van ganando la partida. Hace unos meses decidí iniciar una campaña para que la gente de mi alrededor dejara de hacerme regalos, o por lo menos, regalos materiales. Supongo que no se lo dije a suficiente gente y que tampoco conseguí que las personas a las que sí se lo dije comprendieran completamente el mensaje. Supongo que también debe haber más causas.

El hecho es que durante el "periodo navideño" voy perdiendo.

¿Y por qué no quiero regalos? Pues porque me recuerdan lo contado tantas veces en este blog: el absurdo consumo de recursos que implican en la gran mayoría de casos. El objetivo de hacer un regalo es hacer momentáneamente feliz a la persona a quien se está obsequiando (o así debería ser). A mí no me hace feliz que me regalen cosas que no necesito. Me gusta que se acuerden de mí, pero no me gusta todo lo demás. Me siento culpable cuando acumulo demasiadas cosas. Además... soy un poco caracol, voy cambiando de lugar con mis cosas a cuestas, y cuantas más cosas acumulo, más difícil resulta.

¿De qué sirve que vigile mi propio consumo consciente si luego viene alguien y me regala todo lo que me he negado a comprarme yo? Es un dilema complicado, porque tampoco quiero ofender a las personas que quieren hacerme regalos.

Pequeño recuento de lo que llevo en estos últimos tiempos: la expansión de un juego de mesa, dos libros, un peluche, un pequeño muñeco de plástico, una mini-caja de bombones. Veremos cómo acaba.

sábado, 22 de diciembre de 2012

Sobre publicidad

En las últimas semanas he visto muchas críticas feministas a anuncios de televisión, o de no televisión. Por ejemplo, en Las princesas también friegan se plantea la pregunta: ¿cuál es la imagen, las imágenes que queremos que se proyecten de nosotras?

Y esa es la gran pregunta. Y donde veo el mayor problema. Si estoy en contra del capitalismo y el sistema económico tal y como lo entendemos ahora, ¿cómo va a existir un anuncio que me guste? O más aun, ¿no sería mucho más preocupante que viera un anuncio que me gustara? ¿De verdad debo desear encontrar una buena reprensentación de las mujeres tal y como yo las veo? Eso me convierte directamente en una potencial compradora desde el punto de vista de El Sistema. Y yo no quiero que El Sistema me vea así, de la misma manera que no tengo ningún interés en resultar atractiva a determinados seres que me cruzo por la calle.

Aun así, la propaganda que sirve para intentar vender, también sirve como propaganda de El Sistema, y por lo tanto ayuda a perpetuar el patriarcado (esa gran prisión mental colectiva que perjudica tanto a mujeres como a hombres). En Pikara, leo un artículo sobre el sexismo en los catálogos de juguetes. Nada nuevo. Llevo desde muy pequeña enfadándome cada vez que veo un catálogo de juguetes. Y eso es lo triste, que sigamos así. Pero lo que realmente me deja perpleja (y aterrorizada) es un comentario en ese artículo que dice "Y lo peor es que casi siempre la cosa es tan sutil que no se aprecia, que no nos choca". ¿Sutil?? ¡Más evidente no puede ser!!

Es ese verlo sutil lo que me llevaba a enfadarme con las niñas de mi alrededor cuando yo también lo era. Aunque raramente lo mostrara. Me entristecía y me enfadaba por dejarse engañar, por caer en la trampa y no darse cuenta ni después de caer (al parecer les pedía mucho más a ellas que a ellos, ya que con ellos no me enfadaba tanto). Mirando con retrospectiva, creo que también eso me llevaba a menospreciarlas, cual amante desengañadx de novela rosa barata. Ahora intento no enfadarme con las personas, y solo hacerlo con El Sistema, me parece una actitud más útil. Y especialmente, intento no menospreciar a nadie, ya que eso me hace caer a mí en otra trampa de la que también se aprovecha El Sistema (divide y vencerás).

Hace unos meses Loreto publicaba una entrada sobre feminismo femme. Se puede ser femme y feminista, e incluso se puede ser femme y anticapitalista (que sí, que sí, de verdad, se puede). El problema está en cómo el Sistema se aprovecha de las respresentaciones de masculinidad y feminidad existentes y las refuerza para vender y así perpetuarse. No solo pasa con las representaciones de género, también con cualquier otra representación con la que nos identificamos. Quizá el ejemplo más claro es el frikismo, en sus muchas vertientes. Cada vez es más exagerado el tópico de "somos lo que consumimos". El problema es ese, definirnos a partir de nuestro consumo, nuestras máscaras de V de Vendetta, nuestra falda de Desigual, nuestro móvil iPhone de Apple, nuestros juguetes de Imaginarium, etc.

El problema es que somos nosotrxs quienes reforzamos El Sistema. El problema es que somos un nicho de mercado (porque lo permitimos al comprar lo-que-sea para identificarnos a nosotrxs mismxs). Es un sistema en bucle, donde somos la parte que debe controlar y sin embargo nos dejamos controlar, consiguiendo que el sistema tome vida propia.

Esto iba de anuncios. Me falta uno que me parece especialmente hiriente. Porque no pretende ser capitalista, ni pretende vender, sino que se supone que debe servir para concienciar y conseguir un mundo mejor. Hablo de ese anuncio en el que Imanol Arias se pone de príncipe azul salva mujeres maltratadas. Me ha parecido muy acertada la crítica leída en Nunca fui esa rubia. En la línea de la crítica hecha tantas veces sobre la representación de las mujeres maltratadas y los anuncios que se hacen para teóricamente combatir el maltrato. También June Fernández ha escrito varias veces sobre este tema, y en una de estas, nos habló de una campaña hecha en Nicaragua con un planteamiento totalmente distinto. Este me gusta más, claro.

Edito para añadir un enlace a este artículo de loboestepario.net. De cómo la publicidad ha ido cambiando el ideal de mujer y de cómo esa estética de consumo se ha ido convirtiendo en una declaración de identidad de las mujeres (aunque creo que puede verse algo parecido con la estética masculina). Y ya que estamos, también el artículo que estaba buscando al encontrar este. 

CUP

Discurs de David Fernàndez al debat d'investidura.

jueves, 20 de diciembre de 2012

Clan

Hay un tipo de juegos de mesa en los que se crean identidades ocultas, que de entrada son colaborativos, pero que incluyen "unx traidorx" entre las personas que juegan, que tiene como objetivo para ganar lo opuesto al resto. Hay muchas variantes. (No voy a nombrarlos, aunque podría. Parece ser que conozco la mayoría de juegos de mesa que se venden en Barcelona.)

En este tipo de juego siempre existe la duda de cuando "delatarse". Cuando empezar a actuar como requiere el personaje para conseguir su objetivo y ganar. Mi filosofía suele ser "cuanto antes, mejor". Y ahora me siento un poco así en la realidad, con la necesidad de tomar medidas rápidamente, pero con la dificultad de la incomprensión sobre este hecho a mi alrededor. Una siempre piensa que el mundo no acabará hoy y que ya habrá tiempo mañana para cambiar. Pero ya vamos cuesta abajo y cada vez que invertimos tiempo y recursos en estar mejor en el escenario en el que vivimos, es menos tiempo y recursos que invertimos en ir en la dirección necesaria.

Y en esas sigo, pensando cositas. De mundos ideales y de mundos posibles. Supongo que con la esperanza de encontrar un mundo posible que sea habitable.

Recuerdo la serie de dibujos Gárgolas, que por esas cosas de la vida seguí durante algún tiempo. Me gustó la filosofía de clan, de la que hablan, aunque no se ve demasiado. Creo que es un tipo de vida que me gustaría. Formar una comunidad, sin que haya necesariamente ningún lazo sanguíneo entre lxs componentes, integrada por personas variadas que se complementan entre ellas. Dentro de este grupo habría personas de distintas edades, también niñxs, que no tendrían una figura de madre ni de padre tan marcada como en la sociedad actual. Así que las maternidades y paternidades serían compartidas en buena medida, sirviendo de referente, instruyendo, y permitiendo que cada criatura eligiera a quien quiere acercarse más.

Faltaría la parte de cómo se produciría la entrada y salida de personas de esta comunidad. Pero dado que no voy a instaurar el sistema, no voy a preocuparme por eso. Alguna manera encontraríamos. Quizá la curiosidad sería motor suficiente. 

Me gusta lo estable que resultaría. Quizá porque no me gustan mucho los cambios (por paradójico que suene esto viniendo de alguien que no para de pensar en cómo cambiarlo todo), especialmente en la parte afectiva.

Hace meses escribí una entrada que no llegué a publicar en la que hablaba de uno de los mayores problemas de terminar una relación de pareja. Si la relación es larga, esa persona pasa a ser mucho más que una pareja que da amor, sexo, y el resto de cosas que se supone que da una pareja. Se convierte en parte de la familia. Y renunciar a la relación con un miembro de la familia es muy duro. No debería darse esta renuncia a una pareja y a una parte de la familia de forma simultánea.

Aquí aclaro a qué me refiero con familia. Para mí familia es un concepto muy parecido al de clan, no se trata de los lazos de sangre existentes, ni al título que se le dé a la relación (hermanx, primx, madre, etc.). Se trata de la convivencia que ha existido, del tipo de relación, de conocerse, de confianza (no para contar secretos, sino para saber que esa persona seguirá a tu lado aunque tengas un mal día).

En este sistema imaginario, las personas podrían acercarse o alejarse según sus apetencias, pero una ruptura no sería un cambio tan brusco. Porque el resto de cosas no cambiarían, o no tendrían por qué cambiar. Y porque sería fácil que dos personas continuaran estando ahí la una para la otra si fuera eso lo que quisieran. Y porque habría otras personas en las que apoyarse fácilmente. Y ni siquiera tendría que existir el sistema de relaciones en parejas monógamas tal y como las entendemos ahora, y eso también creo que sería bueno.

O quizá lo estoy mirando solo por el lado bueno. No lo sé. Pero en general me gusta la idea de clan tal y como lo estoy imaginando.

martes, 18 de diciembre de 2012

Libro

Hace tiempo que no leo ficción. Me apetece leer un libro que sea así:

- Situado en otro mundo. Que se parezca a este en alguna cosa, pero sea distinto.

- Protagonizado por una mujer.

- Que la mujer no se limite a buscar a un hombre que tome las decisiones por ella, ni tampoco se dedique a entrar en pánico continuamente. Que tenga personalidad y no por ello deje de ser creíble como mujer.

- Debe existir la bisexualidad. Mejor si lo es la protagonista. O pansexualidad. O otra sexualidad que no sea convencional. Pero que se trate con naturalidad, no como si fuera lo único importante del personaje.

- Con aventuras, acción.

- Que me cuenten cómo funciona esa sociedad, distinta a la nuestra. Y que me sorprenda.

- Que acabe bien. O por lo menos, no horriblemente mal.


Como comentario, hasta la fecha los libros más parecidos a lo que pido que he leído son estos: Temblor, de Rosa Montero; La mano izquierda de la oscuridad, de Ursula K. Le Guin y Orlando, de Virginia Woolf. A la primera creo que le faltaba la parte de bisexualidad o similar, aunque no estoy segura. La segunda falla más, porque eso de "protagonizado por una mujer" no acabaría de ser... pero lo compensa hablando de una sociedad sin sexos diferenciados, que también me parece muy interesante. Y la tercera y última... es otra cosa. No es ciencia-ficción, pero tampoco es realidad. Y con el resto de puntos pasa algo parecido, es un "no pero sí" o un "sí pero no". Y como es otro de mis libros favoritos, también lo doy por válido.

No creo que sea casualidad que los tres estén escritos por mujeres.

lunes, 17 de diciembre de 2012

Emociones y principios

Esto de tener a niñxs cerca permite observar comportamientos interesantes. Con los años aprendemos a moderar u ocultar algunas emociones, aunque siguen ahí. Lxs niñxs aun no han aprendido a hacerlo, así que pueden verse claramente.

Como la timidez. Conversación:
Alguien hablando con un niño - ¿En qué idioma has hablado con los otros niños?
Respuesta del niño - En ninguno. No he hablado, me daba vergüenza.

La timidez a menudo se confunde con "ser demasiado buenx". O con falta de carácter. O con hablar poco en general. Y no tienen nada que ver cada una de estas cosas con las otras. Entre personas adultas ya deberíamos haberlo aprendido, pero no, a menudo lo confundimos igual, y eso da lugar a malentendidos y situaciones inesperadas.

Más interesante es el sentimiento de culpa. Situación: dos niños jugando, uno le hace daño al otro involuntariamente. Reacción del que ha sufrido el daño: ponerse a llorar. Reacción del que ha hecho el daño: ponerse a gritar "DISCULPA".

El sentimiento de culpabilidad es muy desagradable, así que a menudo reaccionamos con agresividad, o a la defensiva, como si fuera culpa de la otra persona que nos sintiéramos así.

Gestionar las emociones es un tema complicado. Por lo general, nadie nos enseña a hacerlo directamente, en el mejor de los casos recibimos buenos ejemplos (que también podrían ser malos y reforzar más el problema) o buenos consejos (lo mismo). En un tema tan esencial en la vida como este, seguimos aprendiendo principalmente por la vía más salvaje, a base de prueba-error. ¿Cuantos de los problemas que tenemos vienen directamente de una mala gestión de las emociones, ya sean nuestras, ya sean de otras personas?

Como con el egoísmo, o la búsqueda de la máxima satisfacción personal. No creo que deba estar reñido con buscar un bien colectivo, o de varias personas. Dentro de una pareja, yo no estoy mejor si mi pareja está peor, al contrario. O en el conflicto España -  Cataluña, yo no estaré mejor si una madrileña está peor, y al revés tampoco creo que funcione. A menudo se plantean las cosas como si el hecho de que otra persona tenga algo me restara a mí. Y sin embargo, si todas las personas del mundo de repente se iluminaran y se pusieran a buscar activamente el bien colectivo, eso automáticamente provocaría el bienestar de todas las personas del mundo. Lo mismo suele funcionar dentro de grupos más pequeños: pareja, amistades, familia, países, comunidad de vecinos, club de go, etc.

Y aquí voy a comentar mi filosofía de principios y fines. Ante la frase "el fin justifica los medios", yo la niego rotundamente. El fin y los medios deben estar de acuerdo. Si mi objetivo es la paz, no la conseguiré con la violencia. Si mi objetivo es la supervivencia, la violencia puede estar justificada.

Dentro de las relaciones humanas, si mi objetivo es ser feliz, no debo hacer cosas que me hagan infeliz. Entonces debo saber qué me hace feliz y qué me hace infeliz. Por ejemplo, ¿me hace feliz que una persona a la que quiero sufra? Para mí la respuesta es que no, así que en la medida que pueda, evitaré el sufrimiento de las personas que quiero. Eso a veces puede entrar en conflicto con otros objetivos. Por ejemplo, ¿me hace feliz que me hagan daño? Respuesta obvia: no. Así que debo actuar para evitar que me hagan daño. Si eso entra en conflicto con el principio de "evitar perjudicar a las personas que quiero", debo poner en orden mis prioridades. Debo tener claro cual es el objetivo para poder decidir los medios.

No es un método infalible, claro. Siempre pueden producirse errores. O puede haber circunstancias en las que no dé tiempo a hacer toda esta reflexión. Pero creo que siempre es más fácil improvisar o rectificar si se tienen claras las ideas. Y de nuevo, siguiendo la misma filosofía, si después de cometer un error me dedico a mortificarme por ello, voy en contra de mi objetivo "ser feliz", así que trataré de evitar hacerlo. Sin embargo, sí trataré de aprender de la experiencia para futuras ocasiones, o si es un tema aun abierto, para tomar medidas paliativas (si le he pegado una patada a un muro, igual necesito vendarme el pie; si le he hecho daño a otra persona, igual debo pedirle perdón; si me he equivocado de rumbo, igual debo rectificar, etc.). 

Como con la timidez, hay quien confunde poner en práctica esta filosofía con "falta de carácter" (que si fuera el caso, ¿qué más da? ¿En qué sentido es mejor una persona "con carácter" que una persona "sin"? Especialmente cuando el carácter suele parecerse demasiado a la agresividad en este tipo de comentarios) u otras cosas. De nuevo, esto me demuestra que no tenemos claro lo que queremos en la vida. No creo que el problema sea solo con el amor romántico, creo que va mucho más allá.

viernes, 14 de diciembre de 2012

Respirar

Hace años hablaba con una persona de esas a las que les contaba cosas difíciles. Una de tantas. Una más con la que luego perdí el contacto, como con la mayoría. Cosas de la vida moderna. Me fascina este encontrarse y separarse. Aunque no era el tema sobre el que pretendía escribir.

Decía que hablaba con ella. Y le contaba mi miedo por no saber lo que pasaba en la vida de una tercera persona. Y le dije algo como: ¿y si me necesita y no estoy? O quizá no. Quizá era algo más como: ¿y si le pasa algo y no me entero?

En cualquier caso ella me hizo ver lo absurdo de pensar así. Primero porque era muy poco probable. Luego, porque aunque le pasara, no cambiaba nada el hecho de que yo lo supiera. Y por último, porque esa persona no se preocupaba tanto por mí.

Y era cierto.

Ahora intento no cargar con lo que no me toca. Aunque a veces es difícil. Y vuelven mis miedos. A no estar. A no enterarme. Ahora respiro hondo y recuerdo... todas esas personas por las que me preocupé y que me lo pagaron haciéndome daño. No porque crea que no vale la pena preocuparse por otras personas, al contrario, sigo creyendo que cuando quieres a alguien (en el sentido amplio, no el que se refiere solo a la pareja) hay que darlo todo por esa persona. Sino por ponerlo todo en contexto y relativizar la importancia de los dramas del presente.

Si no estoy yo, estará otra persona o personas. Si he hecho algo inadecuado, será capaz de superarlo y seguir con su vida. Si nos perdemos, encontraremos a otras personas.

Respiro y pienso que en este instante lo único que importa es mi propia respiración. La vida sigue. Los malos momentos pasan. Las cosas que importan son siempre sencillas. Es la crema de calabacín con tostaditas (me encanta la crema de calabacín con tostaditas). Es poder sonreír a otras personas, no importa tanto quienes sean esas otras personas. Es tener personas a las que querer, tampoco importa tanto quienes sean esas personas. Es el hecho de respirar.

martes, 11 de diciembre de 2012

Sobre China

Leo un interesante y completo artículo sobre China. Según este, China está basando su crecimiento económico en una burbuja (muy parecida a la española) de dimensiones descomunales y que está muy cerca de su final. De ser cierto, provocará un terremoto en la economía mundial. Aunque también haría que bajara el precio del petróleo, lo cual, aquí en España, provocaría temporalmente cierta sensación de tranquilidad (puede que hasta bajara el precio de los productos básicos en relación a los salarios). Solo temporal, repito. Luego el precio volvería a subir, seguramente por encima de su precio actual y más allá.

sábado, 8 de diciembre de 2012

Algunos escenarios

Ayer pasé largo rato discutiendo sobre posibles panoramas post-apocalípticos. Creo que en un contexto friky es una buena manera de introducir el tema. Tenemos muchas opciones:

- Montar negocios que funcionen durante la transición. Siempre me parece muy divertido esto de imaginar futuros en los que un grupo anticapitalista nos enriquecemos aprovechando el sistema capitalista y a costa del sufrimiento ajeno. Me hace pensar en lo que cuesta interiorizar los conceptos de izquierdas que rompen con el actual sistema. Y me da ganas de reír por no llorar.

- Seguir el ejemplo de ciertas personas de Estados Unidos obsesionadas con el "sálvese quien pueda"... durante un año. Pudiendo vivir un año con las reservas guardadas en un búnker, quien quiere sistemas alternativos durante toda la vida. Este tipo de cosas me hacen pensar que, si un día tiene que caer un meteorito que acabe con la vida en la Tierra, espero que me caiga justo encima de la cabeza para asegurarme una muerte rápida e indolora. ¡Qué menos!

- Apuntarnos a una comuna hippy. O algo así. Esta es mi opción favorita, claro.

- Una opción a medio camino. Ir a vivir a un pueblo, con terrenos para cultivar en los alrededores. Aprovechar nuestros conocimientos técnicos para hacer la vida lo más llevadera posible. Intentar juntar fuerzas (política local) para conseguir una autogestión eficiente y que no deje a nadie (por lo menos de esa zona) sin unos mínimos cubiertos. Esta es la más razonable.

- Alguna otra ida de olla tipo armarnos hasta los dientes. Lo que da miedo de esta opción es que seguro que a alguien le da por seguirla.

De la opción "cambiar el mundo" en plan global ni siquiera hablamos. Supongo que en el fondo no creemos que eso sea posible. Aunque alguna de las opciones (la tercera y la cuarta) sí que van en la dirección de hacer cambios locales que podrían llegar a representar un cambio más global.

viernes, 7 de diciembre de 2012

Violencia y placer

Vuelvo a un tema más feminista, voy a intentar escribir una entrada difícil para mí. Pienso que como lectora de blogs, ante una entrada como esta me gustaría un aviso. Aunque soy yo: no soporto la violencia, soy capaz de ponerme a llorar solo por ver discutir a otras personas, y si estoy viendo una peli y me encuentro la escena de una violación, o cambio de canal o marcho de la habitación (según las circunstancias).

Y este es el tema: violación. Hace días escribí esta entrada. Al final hablaba de una historia no contada. No voy a contarlo todo ahora, pero sí a situarlo. Tenía cuatro o cinco años, o quizá ambas edades, lo cierto es que no recuerdo mucho.

María Llopis escribió sobre la violación que sufrió en La Habana. Y de cómo lo vio venir y decidió evitar el dolor físico. Y de cómo tuvo un orgasmo. Y a mí me da justo ahí, en el centro de mis pensamientos sobre este tema. Cuando me imagino volver a vivir una violación a menudo me lo imagino así, colaborando para hacerlo menos desagradable. Intentando disfrutar. Aunque suene contradictorio, o algo más allá de la contradicción.

Empecé a masturbarme con cuatro o cinco años. Después de. Aunque claro, no sabía lo que era. Al principio no sabía que una debía esconderse para hacerlo, de tan poco que sabía nada. Luego me llegó el mensaje de que era algo malo y que debía esconderlo. No, debía evitar hacerlo. Pero era incapaz de seguir mis "buenos" propósitos, así que me sentía culpable y me aterrorizaba que nadie llegara a enterarse de lo que hacía. Mucho mucho más tarde (ya adolescente) recuerdo que oí la noticia en la tele de que un estudio decía que la masturbación femenina no solo no era mala, sino que hasta mejoraba la salud de las mujeres. Y entre otras cosas, que subía la autoestima. Y yo pensé que no, que a mí solo me la bajaba y que ojalá pudiera dejar "ese vicio".

Puede que parezca que me he ido del tema, pero creo que no, que es la misma mierda. La mierda de sentirse culpable por sentir placer. La brutal violencia que supone sentirse culpable por sentir placer.

Cuando descubrí que había gente que cortaba el clítoris a las niñas, lo que más me cabreó no era la mortandad de niñas que eso provocaba, ni los problemas en los partos, ni otras cuestiones relacionadas con la salud. Era el hecho mismo de decir que una buena mujer no siente placer físico, hasta el extremo de robarle esa capacidad a las niñas. Y ese mensaje no hay que buscarlo lejos, está aquí mismo, nunca se fue. Basta buscar un poco en Internet para encontrarse millones de fantasías de violaciones en las que "ella en realidad lo desea", refiriéndose a que ella siente placer físico. Y aquí como nota: sentir placer físico NO significa desearlo. No lo significa en absoluto, y no hace que una violación sea menos violación. Puede parecer obvio, pero a mí me ayudó mucho hacerme esa observación.

Volviendo a mi tema, a menudo me he preguntado qué lleva a un niño a actuar como actuaba mi agresor. Su objetivo obviamente tampoco era el placer físico. Se le da demasiada importancia al placer. Creo que se trataba más de control, de poder.

En fin, la vida va de ser feliz, no de tener excusas para ser infeliz. Al final dejé de sentirme culpable por masturbarme y me dediqué a disfrutarlo como uno de los placeres sencillos de la vida.

miércoles, 5 de diciembre de 2012

Derrota

Hay días que me parece increíble que todo siga "igual". La gente en la calle, paseando de una tienda a otra, las luces de navidad, las conversaciones de planes futuros... De vez en cuando todo me parece un sueño.

Como ver un tren acercándose a toda velocidad y avisar al resto de la gente para que se aparte a tiempo, y que se limiten a ignorarme, a mirarme como a una loca y a seguir con lo suyo. Hasta conseguir que yo misma dude de mis sentidos.

Hacía tiempo que no dudaba tanto de mí y de mi capacidad para comprender el mundo. Una cosa es pensar que me falta información, o que no he analizado los datos que tengo con la suficiente atención, incluso que igual necesito otra perspectiva. Esto es muy distinto: es volver a doblepensar. Como vivir en dos realidades distintas a la vez, la que indican mis sentidos, y la que dicen lxs demás.

La parte positiva es que creo que ya veo el camino (aun borroso) y poco a poco van apareciendo los pasos a seguir. Me da miedo hacerlo sola. Pero también sé que los grupos de gente a veces necesitan que alguien empiece a moverse para poder seguirle, incluso cuando ese alguien tiene tan poco liderazgo como yo.

Vuelvo a acordarme de Battlestar Galactica. Quizá toca asumir la derrota y empezar a actuar en consecuencia.

Si en algún momento llego a ver el camino más claro, lo escribiré. Si no lo hiciera, este blog dejaría de tener su sentido (si es que lo tiene). Mientras, seguiré con las chorradas de costumbre. Como calcular cuanta energía gasto. Es un proyecto interesante, me considero una persona que gasta más bien poco en relación a la gente de mi alrededor, pero estaría bien cuantificarlo, quizá me sorprenda.

lunes, 3 de diciembre de 2012

Algunas alternativas

Los últimos días he estado bastante de bajón. La charla a la que fui el miércoles pasado me dejó muy mal sabor de boca. Más que nada porque era por parte de uno de los grupos de gente que debería estar apuntando soluciones y respuestas, y en vez de eso, solo repitieron el manido "cambiar los hábitos de consumo". Que sí, que es necesario, más aún: indispensable. Pero no suficiente. Especialmente si solo se focaliza en la comida.

En The Oil Crash, han publicado un artículo traducido ofreciendo un sistema de "Simplicidad radical" en el que la clase media consigue vivir razonablemente bien en caso de "Gran Colapso" (cómo les gustan los nombres grandilocuentes). Es decir, como se podría vivir bien sin necesidad de gastar la cantidad brutal de energía que se gasta actualmente entre las clases medias de los países "ricos". Algo que, si te paras a pensar, representa una proporción de la población mundial francamente pequeña. También se le pueden criticar otras cosas, como que peca de exageradamente optimista (por muchas razones). Pero aun así, me parece interesante por el enfoque: estoy convencida de que es posible vivir perfectamente y ser plenamente feliz sin tanto gasto absurdo.

Decía que he estado de bajón, pero como siempre, llega el momento de "cambiar de chip" e intentar ver qué hacer a continuación, que sea razonable y no consista en tirarse por el balcón (o cualquier otra forma de suicidio). Hay muchas cosas que se están haciendo y que van en la línea de cambiar algunos de los problemas más graves que tenemos. Por ejemplo, para paliar en parte la dependencia de comida del exterior de las ciudades, en Barcelona está este proyecto: Incredible Edible. No es el único, hay varias cooperativas de consumo de alimentos, que siempre son de proximidad y a menudo ecológicas. En este mismo sentido cada día me gusta más la idea de volverme vegetariana.

De las elecciones catalanas, una de las mejores noticias fue la entrada de la CUP en el Parlament. En eldiario.es hoy publican una entrevista a Quim Arrufat. Me pasé las semanas previas a las elecciones contándole a todo el mundo que si fuera independentista, les votaría. No sé si convencí a alguna de mis amistades independentistas. En cualquier caso creo que tienen un discurso muy interesante y atractivo, y que va en línea de lo que cada día más personas creemos que debe ser la democracia.

En el mismo periódico digital, hace días entrevistaron a Ada Colau, de la plataforma de afectados por la hipoteca (PAH). Me declaro totalmente fan de esta mujer. De nuevo, hablamos de un movimiento social que intenta cambiar las cosas desde abajo, y que rechazan tener ningún líder ni ninguna lideresa. En este caso, toca otro tema vital: la vivienda.

Por supuesto, hay muchas más cosas que se están haciendo. Aunque sigo pensando que es poco probable que tengan éxito, creo que por lo menos hay que intentarlo.

sábado, 1 de diciembre de 2012

Positivo

Entrada rápida. Solo para dejar aquí la web de Positivo, grupo de Mozambique que lucha contra el SIDA/VIH y la discriminación que sufren las personas infectadas. Recordar que aunque aquí ya no es mortal (aunque sigue existiendo el estigma y problemas de salud asociados), el SIDA sigue matando a mucha gente en otros lugares del mundo.

miércoles, 28 de noviembre de 2012

Mínimos

Ir a una charla y apenas encontrar nada nuevo en lo escuchado. Y lo poco nuevo es prescindible, porque son más ejemplos de lo mismo. Abusos legales. O ilegales, pero no perseguidos por la justicia, más bien todo lo contrario. Abusos y más abusos, que de una forma u otra forman parte del sistema.

Y siempre la misma esperanza insatisfecha: encontrar respuestas. Pero no las hay. Caminante, no hay camino. Se hacen cosas aquí y allá, muchos esfuerzos dispersos y que no consiguen llegar a la raíz. Falta de fuerza. Falta de cantidad de gente con las suficientes ganas.

Y el cinismo de pensar que total, da lo mismo, al sistema tal y como lo conocemos le queda poco, en nada se hundirá y como no habremos sido capaces de adaptarnos lo bastante rápido, en su hundimiento se llevará a la mayoría de nosotrxs por delante.

No me gusta ser una de las personas más informadas porque eso significa que el resto lo está muy poco.

En algún momento me encuentro siendo muy borde. Y lo siento, de verdad que lo siento, porque ser borde no sirve de nada. Es lo opuesto a lo que quiero ser. Pero cómo evitarlo cuando la frustración es tan grande.

Mi yo pragmática se está echando una siesta. Voy a probar a despertarla. ¿Cómo actuar cuando lo ves todo perdido? Intentar perder menos... Ni eso veo cómo hacerlo. Si fuera rica intentaría comprar tierras de cultivo en desuso. Para que dejen de estarlo. Pero en este país nadie quiere vender ni un maldito metro de tierra, aunque no vayan a usarlo para nada. Es su "herencia familiar".

Se necesita: generar alimento. Conseguir un medio de transporte de ese alimento que no dependa del petróleo, gas ni carbón. Asegurarse de que el suministro de agua pueda mantenerse también sin ninguna de esas fuentes de energía. Colectivizarlo todo (especialmente las viviendas). Y conseguir un sistema de reparto justo y asumido por todo el mundo. Todo esto solo para tener las necesidades básicas cubiertas.

Luego hablamos de la salud y la educación y todo lo demás.

Quizá deberíamos centrarnos en conseguir que sea posible llegar a ese mínimo en poco tiempo. Y cruzar los dedos para que cuando los problemas se hagan mayores y más visibles, la mayoría de gente se vaya hacia la izquierda y no hacia la derecha.

No irán así las cosas... Pero si fuera posible, si lo consiguiéramos... El impacto sería mucho menor y podríamos ocuparnos del resto de problemas con un mínimo de tranquilidad.

martes, 27 de noviembre de 2012

Sobre las elecciones catalanas

De reflexiones post-elecciones, de momento me quedo con esta de Antonio Baños. Cito un fragmento:
A pesar de la claridad con la que han llegado al 25-N ambas opciones, los catalanes nos vemos permanentemente obligados a matizar incluso las trincheras. Independencia sí pero no con Mas. Recortes bien pero dentro de España. Izquierdas, claro, pero no como tú dices... Eso es lo que me hace feliz. El ruido catalán me tranquiliza.

Dicho esto, algunos números que me gusta hacer con los resultados electorales. Pongamos que los votos en blanco se cuentan como si fueran nulos, es decir, se contabilizan para la estadística, pero no para el reparto de escaños. Y además se sigue el principio de una persona, un voto, y todos los votos tienen exactamente el mismo peso (no existe distribución por territorios). Quedaría esta situación:



Diputados Diferencia
CiU 42 -8
PSC 20 0
ERC 19 -2
P.P. 18 -1
ICV-EUiA 14 1
C's 10 1
CUP 5 2
PxC 2 2
SI 2 2
Eb 1 1
PACMA 1 1
PIRATA.CAT 1 1
UPyD 1 1

Si con el escenario actual ya hay muchas fuerzas políticas en el Parlament (7), con este escenario alternativo, habría aún más (13). En la primera columna está el número de diputados que quedarían, y en la segunda, la diferencia respecto a como están repartidos siguiendo las leyes vigentes.

Con esta perspectiva, los xenófobos de PxC (me niego a escribir su nombre entero) dan un poco más de miedo. Pero como suele pasar, hay otros datos que para mí lo compensan. Como la aparición de Eb (Escaños en blanco), PACMA (Partido Animalista) y Pirata.cat (Partido Pirata). No lo puedo evitar, me gusta la pluralidad. Todas estas apariciones, como también suele pasar, son a costa de CiU (Convergència i Unió), el partido mayoritario; el equivalente a lo que pasa a nivel estatal con PP y PSOE.

Otras cosas. Con el sistema actual, la suma CiU+ERC+CUP da 74 diputados de 135 (un 55% del Parlament), que son los partidos que se presentaron como claramente independentistas. Si añadimos a la suma a ICV (que se supone que votaría a favor del derecho a decidir en cualquier supuesto), son 87 diputados (64%). Y con el PSC (que estaría a favor de una consulta siempre que sea legal), tenemos 107 diputados y un 79% del Parlament. Con este panorama no entiendo como se puede pretender que la consulta por la independencia ha sido rechazada por la gente que ha ido a votar...

Los mismos cálculos con el sistema alternativo, sumando SI (Solidaritat per la Independència), daría un resultado más pequeño en todos los casos. Pero aún así, se mantendría continuamente por encima del 50%. Se mire como se mire, los independentistas ganan por mayoría absoluta.

Y el otro cálculo: qué pasa con izquierdas y derechas. Sumando PP+CiU, tal como ha quedado, tienen 69 diputados, un 51% de peso parlamentario, lo que permitiría seguir con la política de recortes si a CiU se le cruzan los cables. Sin embargo, con el otro sistema, incluso sumando a PxC (que ya es), solo llegarían a los 62 diputados (46%). Como pasa a nivel estatal (donde el PP tiene mayoría absoluta con solo un 44% de votos), el reparto del peso de los votos favorece a la derecha.

Y ya por último... Se ha dicho que CiU se ha hundido por la denuncia de corrupción por parte de El Mundo (me parece absurdo cuando en las anteriores elecciones ya tenía el tema del Palau de la Música encima), o que ha sido porque los independentistas no se han fiado y se han ido a ERC. Yo creo que no es ninguna de las dos. Creo que debemos agradecérselo a las encuestas publicadas, en las que llegó a decirse que CiU conseguiría mayoría absoluta. No hay mejor manera de movilizar a todas las personas que se han visto afectadas por los recortes. Incluso el trasvase de votos desde CiU hacia a ERC creo que se debe más a decir "vale, queremos independencia, pero no de derechas", que no a desconfianza (aunque algo de eso también debe haber). Mientras que parte de los votantes de CiU pueden haberlos abandonado en favor del PP o del PSC, precisamente porque hasta ahora CiU nunca se había proclamado independentista (muchos de sus votantes no lo eran).

I am





¿Será lo bastante sarcástico? Espero que sí...

lunes, 26 de noviembre de 2012

De normas y rarezas

Un amigo nos cuenta (al grupo) que él y su novio han empezado a salir con un tercer chico. Que se habían encontrado haciéndolo sin planteárselo ni planearlo, que todo ha sido "muy natural". Y que está encantado de la vida.

Más tarde, a raíz de este tema, algunos empiezan a comentar sus experiencias haciendo tríos (solo sexo). Y me encuentro pensando que puede que la mayoría de mis amistades se hayan encontrado en algún momento en un trío u orgía. Y de ahí empiezo a pensar en lo natural que resulta el sexo a veces... y en lo chocante que sigue siendo para mí darme cuenta de ello.

Luego con otro amigo comentamos los distintos tipos de relaciones que se pueden formar y que lo más importante es cumplir los pactos que se formen entre las personas implicadas. Hace la siguiente reflexión: antes las parejas se planteaban "para toda la vida", pero ya no. Ahora si una relación termina a los ocho años, se busca otra y ya está. El planteamiento de entrada es distinto, no es para siempre, es "mientras dure", y gracias a eso nos permitimos opciones que en un principio nos resultan más extrañas. Lo desconocido (relaciones no convencionales) de entrada siempre da más miedo, pero sabiendo que si fracasa no será el fin del mundo, el miedo es menos.

Hablando con otra persona, me cuenta que la madre de una de sus amigas quiere que su hija sea "más normal". Contexto totalmente distinto, mucho más convencional. La persona que me lo cuenta se quedó muy sorprendida ante un deseo tan absurdo, y se alegró de ser ella misma muy rarita. No solo eso, dice que todo el mundo debería ser raritx.

Aquí respondo a la pregunta de hace unos días. La diferencia entre ser normal y ser mediocre es la connotación de cada palabra. Lo normal es "lo aceptable" (lo que está dentro de la norma), y por lo tanto es lo que se espera y se desea, su connotación es positiva. Pero ser mediocre es "no sobresalir", y por lo tanto su connotación es negativa. Me jode un montón que se hable de "normalizar el hecho homosexual", en el mejor de los casos eso significa ampliar la norma. Pero mientras exista una norma, habrá personas que se queden excluidas de ella, y por lo tanto, habrá personas marginadas. Y más aun, no se valorará la diversidad como lo que debería ser: un valor positivo.

Y ya que cuento conversaciones... Una persona me responde a un mail enviado hace meses, en el que daba a entender que mi situación emocional había cambiado. Dice que ya me imagina "con un/a amante". Y ese un/a me hace sonreír. Cada día me siento menos rarita, estoy empezando a preocuparme...

domingo, 25 de noviembre de 2012

Votar

Día de elecciones... Lo que más miedo me da es dormirme tanto que no me dé tiempo de ir a votar. Hay quien dice que esto de votar no vale la pena. Que si sirviera de algo no nos dejarían hacerlo. Pero a mí me sigue pareciendo importante hacer ese gesto. Casi ni importa qué es lo que se vote.

Hay que votar. Es una manera más de decir que quiero que se escuche la opinión de la gente. Que quiero democracia. Aunque la quiero de otra manera. No creo que renunciar a los pocos espacios de decisión que tenemos vaya a ayudar en nada a conseguir otros mejores. La abstención me parece un absurdo en estos tiempos.

Como si se hace un referéndum sobre la independencia de Cataluña. Iría a votar por la sencilla razón de que quiero más referéndums. Aunque creo que hay otros temas mucho más importantes a tratar que no donde situar las fronteras... cuando lo que quiero es que desaparezcan las fronteras. Aun así. Porque si las pocas veces que conseguimos que nos pregunten pasamos de ir a responder, ¿con qué fuerza exigimos que nos pregunten más?

miércoles, 21 de noviembre de 2012

Transmitir

¿Cómo transmitir las cosas? Hay palabras que provocan rechazo frontal. Pronunciarlas solo sirve para perder totalmente a la persona con la que se está hablando. Y así no se puede transmitir un mensaje.

Es esencial difundir algunas ideas, es la única manera de conseguir cambios que no pasen por la imposición pura y dura. Si fueran capaces de creérselo, lo tendrían en cuenta en sus actos día a día, y también habría más posibilidades de encontrar soluciones. Pero ¿cómo conseguir que se lo crean?

martes, 20 de noviembre de 2012

Cuando

Siempre dicen (decimos) lo mismo. ¿Cuando se moverá la gente? ¿Cómo puede ser que se queden todos en sus casas? ¿Qué tiene que pasar para que la gente actúe? Siempre en tercera persona.

Cada vez queda menos tiempo. Y está visto que del gobierno no podemos esperar nada bueno, en el mejor de los casos conseguirían no empeorar más las cosas de lo que empeorarán por sí solas (y hasta eso parece demasiado pedir en estos días en los que no paran de sugerir que la única solución es una nueva burbuja especulativa). ¿Cuando dejaremos de esperar a que alguien nos dé la solución?

domingo, 18 de noviembre de 2012

Música para ser feliz

Hace meses me planteé por qué hay tan pocas canciones que sean positivas sin estar relacionadas con el amor. Pasa lo mismo con la música en general, sea o no positiva, la mayoría gira alrededor del amor y el desamor. Pero sin esperar nada optimista, aun puedo encontrar, por ejemplo, muchas canciones protesta, o también puedo encontrar muchas canciones que transmiten rabia y odio, sin que tengan que tener un origen amoroso.

Quizá no escucho la música adecuada, de vez en cuando también me lo planteo. Si alguien tiene sugerencias, estaré encantada de escucharlas.

Mis razones han cambiado, pero el problema es el mismo: no encuentro la música que necesito. De vez en cuando doy con alguna canción, pero con unas pocas canciones no basta... Necesito la música como en pocas épocas de mi vida, y necesito que sea positiva y necesito que no me traiga recuerdos duros ni me reabra heridas. La música es uno de las herramientas más útiles para gestionar emociones, pero ¿cómo hacerlo si faltan las adecuadas?

Cuando empecé el blog nunca hubiera imaginado que dedicaría tantas entradas a la música...

sábado, 17 de noviembre de 2012

como si

De nuevo, discutiendo con las múltiples luchas, a veces aparentemente contradictorias. Bisexual y transfeminista, ¿es eso posible? Llego a replantearme lo de usar esa palabra (bisexual) por eso que siempre me dicen, que refuerza el binomio hombre-mujer, etc. Pienso en buscar otra: polisexual, omnisexual, pansexual, sexual... Luego me imagino yendo a decirle a mi madre o a mi padre, ahora soy esto (insertar aquí cualquiera de esas palabras). Mi madre y mi padre quizá aun se lo tomarían con amor... "esta niña cada día está peor, pero si está feliz así..." Con otras personas el mensaje se perdería totalmente por el camino. Si pretendo difundir la idea de que es posible ser no-monosexual, sigo creyendo que es necesario usar la palabra bisexual. Estos días con el tema del "matrimonio homosexual" he vuelto a verlo muy claro, en los informativos que ve la mayoría de gente se hablaba de "derechos de gays y lesbianas" (en el mejor de los casos). Para la mayoría de la gente esa sigue siendo la realidad, no existe nada más allá del otro binarismo: o gay o hetero.

También en ambientes más "guays" de libertad sexual y bla bla bla vuelvo a encontrarme con los mismos prejuicios. Que las bisexuales solo quieren sexo y no se preocupan por los derechos civiles porque total, no les afectan a la hora de elegir con quien se van a la cama. Y que por eso las lesbianas las miran con recelo, y es muy lógico, porque claro, las lesbianas sí que quieren formar familias con otras mujeres y lo son el 100% del tiempo. Estas ideas también siguen siendo las que tienen las personas autoconsideradas "de mente abierta" pero que no están totalmente metidas en el mundo LGTB o feminista. De nuevo, el problema que tienen con la bisexualidad no es que sea binarista, son los prejuicios que lleva asociada la palabra por no ser monosexual.

Este es un tema, una guerra interna... Luego hay más. Como la de ser de izquierdas y ecologista. En las últimas entradas cuento que es posible que la economía no vuelva a crecer, y que si lo hace puede que sea un crecimiento cada vez más inestable, en periodos breves y seguidos de nuevas bajadas. Esto en el modelo económico actual significa subida continua del paro. Como persona de izquierdas eso no me gusta, claro. Pero las políticas que deberían aplicarse para cambiar esta tendencia a corto plazo son lo opuesto a lo necesario para cambiar las cosas a largo plazo, o en otras palabras, para tener un sistema sostenible y ecológico (que es redundante, porque solo se puede ser una cosa siendo la otra). El caso más claro es el de la lucha minera por mantener las ayudas al sector del carbón (es decir, a las empresas, no a los trabajadores). 

Y sin embargo, pese a todas estas aparentes contradicciones (y tantas otras, alguna de las cuales he comentado en otras entradas), cada día estoy más convencida de que el cambio solo puede producirse si se da a todos los niveles. Ante la frase "la revolución será feminista o no será" estoy totalmente de acuerdo, pero tampoco basta con eso. Debe ser feminista, debe estar por los derechos LGTB, debe garantizar la igualdad de derechos y de oportunidades para todos los seres humanos del planeta, debe ser antiracista, debe romper las fronteras, debe poner las personas por delante del capital o de las banderas o de las lenguas o de cualquier otra idea, debe basarse en la libertad, debe basarse en la responsabilidad, debe tener mecanismos para luchar contra la injusticia y los abusos de poder, debe ser ecologista porque debe poder mantenerse en el tiempo, y aquí seguiría un largo etcétera.

Si en algún momento se da una revolución, debe abarcarlo todo. Cualquier solución parcial será solo un parche y probablemente fracasará. 

Solo hay una manera de conseguir esa revolución: cambiar las estructuras mentales de la gente. Veo cada vez más gente diciendo lo mismo: este sistema está colapsando, necesitamos alternativas. Y para llevar a cabo esos cambios, se aplican los sistemas "clásicos": manifestaciones, vagas y otras acciones de protesta más pacíficas o más violentas. Y cada vez tengo una sensación mayor de que nada de eso sirve. No sirve protestar. Hay que actuar como si ya lo hubiéramos conseguido. Si se desea un sistema solidario, hay que actuar solidariamente. Y una vez esto lo tengamos, si hay represión, ya se verá como se combate.

Escribo esto y me doy cuenta que buena parte de estas ideas no son mías... 

martes, 13 de noviembre de 2012

Futuro renovable

Siguiendo el blog que comentaba ayer (The Oil Crash), me he encontrado que responden a las preguntas que llevo tiempo planteándome sobre si es posible un futuro basado en energías renovables, y más concretamente, cuales serían esas energías. En esta entrada se presenta un artículo publicado en una revista científica (lo que significa que por lo menos ha sido revisado por otras personas que saben del tema) en el que se analiza cómo podría ser ese futuro energético. 

Pasa, por supuesto, por reducir drásticamente el consumo energético actual. Lo cual, como ya comenté hace meses, pasa por reducir drásticamente el consumo de "cosas". Lo cual nos lleva, como de costumbre, a una única solución: replantearse el sistema económico entero.

Comentar que tanto los autores del artículo como el autor del blog trabajan en el CSIC, centro de investigación que está sufriendo unos recortes bestiales. Sé que este tema parece menos grave como otros como la educación primaria o la sanidad... Pero ahora mismo recortar en investigación puede condenar a la miseria a muchas muchas generaciones de la humanidad, no solo la nuestra, no solo la próxima. La única manera como es posible que esta "crisis" sea realmente una crisis puntual y no se convierta en el estado común de las cosas e incluso vaya cada vez a más, pasa por la investigación.

También comentar algo que es sorprendente que se sepa tan poco: España es un país líder en el sector de las energías renovables. Por ejemplo, puedo decir (porque llevo tiempo estudiando este tema) que la mayoría de artículos que se escriben sobre concentradores solares hacen referencia a los construidos en la Plataforma Solar de Almería para hacer ensayos en este campo. Y sin embargo casi nadie conoce ni siquiera la existencia de esta plataforma...

lunes, 12 de noviembre de 2012

Escatología

Esta tarde le he preguntado a cierta persona qué significa escatológico. Me hubiera gustado que me desarrollara bien la idea, pero no teníamos mucho tiempo. Y como siempre que me cuentan algo oralmente, se me olvida una parte y luego me da rabia. Intentaré escribir lo que he entendido, o la parte que recuerdo:

Me ha dicho que hace referencia a el fin último. Como ejemplo, dice que se habla de el comunismo de Marx como un comunismo escatológico, porque no es un comunismo que sucede en el ahora, sino en un futuro lejano.

Entonces ha usado un "nosotros" que no sé a quien se refería... Dice que nosotros rechazamos ese fin último, porque queremos el cambio en el ahora, queremos la felicidad ya. Frente a las promesas de futuros idílicos, ya sea en futuros lejanos de la humanidad, ya sea en vidas futuras individualmente, que siempre pasan por apretarse el cinturón hoy para poder alcanzarlos, nosotros creemos que no debemos esperar, que debemos vivir ahora como queremos vivir. Sin que eso signifique que no tenemos esperanza de un mundo mejor, más bien al contrario: para aspirar a un mundo mejor, debemos empezar hoy a poner en práctica lo que creemos.

Al despedirnos le he dicho que algún día tiene que darnos una charla sobre teología de izquierdas. Luego he caído en que tampoco sé a quien me refería con ese nos.

Condenados a decrecer

Me mandan esta entrevista en el programa Singulars, de TV3 (televisión pública catalana). Está en catalán, como suele pasar en esta cadena, pero el entrevistado ha escrito un resumen en castellano en su blog. Me ha parecido muy interesante, porque habla de la economía tal como creo que debería hacerse, hablando de los recursos, especialmente los recursos energéticos. En la línea de lo que he contado otras veces, pero mucho más desarrollado, con muchos más datos y muy bien estructurado.

A veces, al defender esta postura (que deberíamos mirar más qué pasa con los recursos reales y menos los indicadores económicos "clásicos"), me han acusado de demagogia. Quizá si lo dice un tío más serio en un plató de televisión la idea resulta más creíble...

jueves, 8 de noviembre de 2012

Cooperativas

Hace ya algunos años fui a una charla sobre cooperativas. No tenía ni idea de lo que eran, pero el nombre molaba, así que decidí informarme. Vino una chica que poco antes había empezado una, junto con dos o tres personas más, y se dedicó a contarnos su experiencia. Todo muy coloquial.

Me gustó, claro. Especialmente me gustó su planteamiento. Decía cosas como que una empresa cooperativa no tiene por qué ser superguay, llena de buenas personas que quieren un mundo mejor y que se pasan el día sonriendo. Puede que solo eligieran formar una cooperativa porque decidieron que era más rentable a corto plazo.

Está la idea básica de repartir equitativamente los beneficios en función de la cantidad de trabajo realizado, y no en función del dinero invertido en la empresa. Pero el cómo se mide esa "cantidad de trabajo" tampoco es algo estricto. Puede entenderse como "horas trabajadas", sea con el cargo que sea (tanto cobraría quien ocupe la presidencia, como quien está en secretaría). Puede decidirse que no, que es mejor tener en cuenta la cualificación profesional (títulos, experiencia...). O puede repartirse en función de los proyectos realizados, porque una persona puede necesitar cuatro veces más tiempo para realizar un mismo proyecto, y eso no significa que deba cobrar cuatro veces más. Aunque puede invertirse el argumento: si una persona necesita cuatro veces más tiempo para realizar un proyecto, al final del año, se habrá ocupado de cuatro veces menos proyectos que el resto. ¿Es justo que cobre cuatro veces menos?

También está el principio de "una persona, un voto", en contraposición al funcionamiento de sociedades anónimas y sociedades limitadas, donde se sigue el "una acción, un voto". Pero aquí ya entramos en las distintas categorías de socixs, y ahí ya empiezo a perderme... El modelo del que nos habló esta chica era muy sencillo: las mismas personas que trabajaban eran las que ponían el capital inicial. Un sistema práctico, porque evita la separación entre la toma de decisiones y ser quien tiene que asumir esas decisiones. Lo cual lleva a responsabilizarse de todo el proceso, tanto tomar decisiones como luego acatarlas, como el hecho mismo de buscar que la empresa funcione.

En algún momento también habló de la necesidad de crecer de una empresa. Decía que era "lo natural" para una empresa. Esa parte no me gustó tanto. Si no se consigue un modelo basado en asumir un tamaño manejable y quedarse ahí, se volverá a chocar una y otra vez con el mismo problema. El crecimiento infinito no existe. El crecimiento económico tal y como se entiende ahora va intímamente ligado al endeudamiento, y este a su vez es el cáncer del sistema económico. Con este sistema lo que se consigue son grandes gigantes con pies de barro, que inevitablemente acaban por aplastar a las mismas personas que se alimentan de ellos.

En cualquier caso creo que es necesario repensar el modelo de empresa clásico. Para cambiar algo en el mundo debemos empezar por cambiar dos cosas: nuestra manera de trabajar y nuestra manera de consumir. Solo si conseguimos hacer ambas cosas de forma ética tendremos alguna opción de conseguir un cambio global.

martes, 6 de noviembre de 2012

Ejercicio mental

¿Cual es la diferencia entre ser normal y ser mediocre?

Vida útil

Hace unos meses volví a ver un fragmento de uno de los reportajes sobre obsolescencia programada. Como es un tema que ya conozco, no lo dejé mucho rato... Pero me dio tiempo a ver como relacionaban en concepto de "vida útil" con la obsolescencia programada. Me resultó curioso.

De vez en cuando alguien me pregunto si en la carrera alguien me vendió la idea de que la obsolescencia es buena. O algo así. En una de estas me quedé dudando, dije que así tal cual no... pero que claro, sí se habla de la "vida útil de los productos" como elemento indispensable de cualquier proyecto. Esta eso, y está la repetición machacona de que nuestro único objetivo como ingenieros (siempre generalizan en masculino) es conseguir beneficios para la empresa en la que trabajemos.

Sin embargo, no creo que se pueda decir que considerar la vida útil de algo que está en fase de diseño signifique directamente defender la obsolescencia programada para conseguir beneficios para la empresa que comercialice ese algo. Se puede usar ese mismo concepto con otras intenciones. Por ejemplo, es necesario tener en cuenta que nada dura para siempre. La información de durante cuanto tiempo va a ser usado algo puede servir para planificar cómo repararlo, reutilizarlo o reciclarlo. De hecho, si se aplica bien el concepto y no se abusa de él, lleva directamente a responsabilizarse de todo eso a la hora de diseñar.

Por ejemplo, imaginemos que voy a diseñar un sistema de engranajes. Los engranajes se desgastan mucho con el tiempo. Así que suele aplicarse el sistema de poner una rueda dentada más "débil" que el resto, de manera que siempre sea esa la que se desgaste más. Con esto se consigue preservar las demás, de manera que a efectos prácticos, se podrá mantener más tiempo casi toda la maquinaria, sencillamente cambiando periódicamente la rueda "débil". Incluso se puede planificar cuanto tiempo debe pasar entre recambio y recambio, sin que esta llegue a romperse, de manera que pueda elegirse en qué momento se hace (cuando la máquina que tiene los engranajes no se esté usando, por ejemplo), reduciendo el perjuicio generado.

Concretemos un poco más. Hasta aquí se puede pensar "que se joda la máquina cuando sea, y a mí que más me da". Vale, pero ¿qué pasa si ese engranaje está en el metro y su avería provoca un corte en el servicio en hora punta que dure hasta que se consiga sacar el metro estropeado de la circulación?

Además, siguiendo con el mismo ejemplo, aunque no es evidente, con este sistema se reduce la cantidad de material requerido (se cambia solo una rueda cada vez, no la totalidad del sistema de engranajes), y reduce la enegía consumida en su conservación, porque facilita la programación de los cambios y porque se requiere menos energía para fabricar una sola rueda (y de peor calidad) que para fabricar toda la caja.

Aquí me imagino la pregunta: ¿y no podría diseñarse/fabricarse de manera que durara el máximo tiempo posible toda la caja de engranajes? Sí, pero siempre será un tiempo finito. Y quizá no compense. De nuevo, vuelvo a hablar de recursos. Todos los recursos "de más" que se están invirtiendo en hacer esa caja mejor de lo necesario son recursos que no estarán disponibles para otras cosas que pueden resultar más útiles. Al final siempre se trata de encontrar un equilibrio entre los recursos de los que se dispone y las necesidades que se desea cubrir.

Total, que aunque creo que es cierto que dentro de ese concepto de "vida útil" se puede colar la idea de obsolescencia programada como algo "bueno" que incluso debe hacerse para conseguir beneficios para la empresa, tampoco me parece correcto exagerar. El concepto en sí no es malo, lo malo es el abuso que pueda hacerse de él y el hecho de trabajar sin ética o sin plantearse lo que se está haciendo.

sábado, 3 de noviembre de 2012

Amor y relaciones

He vuelto a caer en una vorágine en la que solo soy capaz de pensar en el amor romántico. Afortunadamente, en medio del caos, he encontrado este artículo de Coral Herrera: ética para amador@s.

No es la primera vez que escribo sobre este tema. A menudo lo que leo no me gusta porque o bien es demasiado utópico, o demasiado dramático, o no me da las respuestas que busco. Se puede hablar mucho de lo que está mal, pero si no se da una versión positiva, si no se habla de lo que debería ser y de cómo conseguirlo, creo que no resulta útil. Incluso puede ser contraproducente, ya que solo sirve para recrearse en la misma porquería de siempre.

Este artículo sí me ha parecido útil, quizá por el momento vital por el que paso, pero creo que es algo más. No da recetas milagrosas, ni frases grandilocuentes, ni se limita a contarme lo que suele ir mal en la mayoría de relaciones. He seleccionado varios fragmentos que me han parecido especialmente relevantes. Voy a poner unos pocos:
Y es que a menudo no nos relacionamos desde el amor, sino en base a luchas de poder para dominar o someterse al otro. Esto nos hace “guerreros” de una batalla en la que todos salimos heridos, porque a menudo nos hacemos daño a diario y apenas nos damos cuenta de que convertimos el mal trato en algo cotidiano.
Estas luchas de poder creo que son el mayor de los problemas en una relación de pareja. No sé si para todo el mundo, pero sí para mí. Es muy desagradable sentirse en lucha con la persona con la que se desea lo opuesto a eso. Soluciones: paciencia, mucha paciencia, diálogo, aprender a conocerse mutuamente y descubrir los propios límites.

No estoy muy segura de que sea suficiente. Me he encontrado muchas veces en la situación de no querer ceder por miedo a que me "aplasten". Me da miedo que la personalidad de la otra persona invada mi propio espacio hasta reducir mi propia personalidad a la nada. Dicho con una metáfora, cuando siento que me empujan, tengo tendencia a quedarme clavada en el sitio donde esté, porque creo que tolerar un empujón está mal (luego puede venir otro, luego otro, y acabar convirtiéndose en un auténtico abuso). El problema está en encontrar el límite entre el "no dejarse empujar" y convertirse en la persona que empuja, que es casi un acto reflejo.
Así pues, el amor es una especie de espejismo a través del cual nuestra percepción de la realidad se distorsiona; los enamorados se encuentran a merced del engaño ilusorio que sufren, pero no por ello renuncian a la realidad, sino más bien al revés. La necesitan desesperadamente para no caer en los abismos de la locura, para no arrojarse al poder de la obsesión, para no perder su autonomía en pos de un amor fabricado desde la propia mente. 
La lucha contra el espejismo resulta agotadora. Pero indispensable. Creo que es muy importante no olvidar nunca que se está en un estado mental alterado. Forma parte de lo que antes he llamado "descubrir los propios límites". Igual que me parece muy importante recordar que todo estado de enamoramiento es solo temporal. Y aquí, subrayo, hablo del enamoramiento, no del amor de pareja.
Y es que cuando el amor no goza de igualdad de condiciones, es inevitable pasarlo mal por esa descompensación.
A esto hay que sumarle que nunca existe una total igualdad de condiciones. Por eso es tan importante buscar mecanismos para no encallarse en esa desigualdad y reducir la parte de "pasarlo mal" a lo mínimo indispensable.
Debido a lo complicado que es romper lazos con alguien después de mucho tiempo, y a la natural torpeza de los humanos en sus relaciones afectivas, hay amantes que se dedican a putear al otro para que el otro reaccione y sea el que tome las riendas de la ruptura. Putear significa "mentir para no hacer daño", quedar y desquedar como si el otro no tuviese otra cosa que hacer que estar pendientes de nuestra agenda y apetencias, lanzar mensajes confusos "te quiero pero no sé", o peticiones como "necesito un tiempo", que solo dilatan el ya de por sí doloroso proceso de la ruptura.
Quizá por esto no creo en lo de "tomarse un tiempo". Pero es difícil la sinceridad sabiendo que provocará dolor... Es de las cosas que peor llevo, tanto dentro de una relación como cuando me he encontrado rompiendo con alguien. Trato de recordar que el otro camino, el de las mentirijillas, suele resultar más doloroso pasado el tiempo.
Si hay terceras personas, creo que es importante hablarlo; el enamorado, por muy dolido que esté, debe aceptar que es mejor saberlo que no saberlo (antes podrá rehacer su vida), y también acepar que no es algo que podamos controlar; nadie puede elegir de quién se enamora y cuanto tiempo.
Es complicado en un mundo en el que lo peor de lo peor es ser cornudx. Aprender a llevar mejor los celos es un gran reto para mí. Trato de no cargarlos contra la persona o personas que los "generan" (recordando que realmente quien los genera soy yo). Si se cree en la libertad, se debe asumir que los celos no pueden usarse como arma arrojadiza y excusarse luego con un "no puedo evitarlo". Ahora intento aprender a vivir con ellos y a no reforzarlos. También intento luchar contra mis sentimientos de culpabilidad, aunque eso me cuesta bastante más...
Esta es la razón por la cual mucha gente conserva a sus parejas como amigos especiales a los que se quiere para toda la vida;
Del artículo, no acaba de convencerme cómo se le da mucha más relevancia a la amistad que a la relación de pareja (o romántica en general), creo que es perfectamente compatible esa especie de amistad idealizada con una relación romántica. De hecho, creo que es la única manera de vivir una relación romántica de forma saludable... Pero de cualquier modo, y quizá precisamente por eso, creo que este es el gran reto: conseguir que los sentimientos amorosos no impidan que la relación evolucione hacia una amistad saludable y especialmente profunda. Aun así, tampoco creo que haya que obsesionarse, si no puede ser, no puede ser, y más vale perder a una persona querida que la propia salud mental.

Y ya para acabar con el artículo:
Creo que una solución ética al problema del desamor o del desencuentro amoroso es la plena comunicación basada en el nivel emocional del discurso: "yo me siento así...", "pues yo me siento asá". Desahogarse, expresar la pena, la rabia, el miedo, recordar buenos momentos, darle un final bonito a la historia, con abrazos y muestras de cariño. Hacerle saber al otro que fuimos felices, que lo disfrutamos, que fue importante en nuestras vidas a pesar de la ruptura.
También habla de empatizar, ponerse en el lugar de la otra persona, tanto en caso de ser la persona amada como en el caso de ser la persona que ama, para evitar los malos comportamientos. Me gusta la parte de las muestras de cariño, que una relación de pareja se acabe no significa que no pueda volver a haber ningún contacto, ¿no?

Alguna cosa más a añadir... Me parece importante saber estar solx. Es algo que también me cuesta, por inercias de otras épocas. Aprender a no tener pareja creo que pasa por cultivar el resto de relaciones: amistades, familia, u otras personas importantes en nuestras vidas. Y si no existen esas relaciones, o no las suficientes, crearlas puede ser un buen estímulo para seguir adelante. También se puede trabajar en otros aspectos, no todo en la vida son relaciones humanas (aunque para mí sean la parte más importante con diferencia), también pueden dedicarse más energías a aficiones, a la carrera profesional, a cultivar nuevos conocimientos, a viajar, al activismo, etcétera.

Creo que es muy importante tener objetivos vitales que trasciendan la pareja. Al fin y al cabo, lo de que el enamoramiento es finito también funciona cuando las cosas van bien. Aunque durante una temporada una sola persona pueda convertirse en "nuestro todo", siempre llega un momento en el que deja de ser así.

En resumen, que puestos a no dejar de darle vueltas a este tema, he decidido ponerlo por escrito. Quizá solo me sirva a mí, pero eso ya me parece suficiente...

miércoles, 31 de octubre de 2012

Me canso

Me canso de enfadarme. Llega un punto en el que empiezo a pasar de todo. Supongo que eso me convierte en un ser horrible.

No cuesta mucho conseguir que vuelva a hervirme la sangre. Basta, por ejemplo, con poner unos pocos segundos alguno de los debates de televisión española. Aunque casi diría que va más allá del cabreo y se convierte en pura incredulidad. ¿De verdad siguen hablando como si se tratara de un partido de fútbol? ¿De verdad siguen justificando toda la mierda que justifican?

Decía que me canso de enfadarme. Quizá por eso últimamente vuelvo a sentirme alejada del mundo, como si nada de esto fuera conmigo. Como si viera titelles (¿títeres?). O como si solo fuera el marco necesario para vivir otras experiencias. No todas malas...

Cosas que puedo agradecerle a la crisis (llamémoslo crisis...):

- He redescubierto a algunos de mis parientes, lo cual es todo un lujo.

- He aprendido a apreciar la cebolla cocinada (cruda sigo sin verme capaz de tolerarla).

- He aprendido a valorar mucho más las legumbres. He aprendido aun más que eso: un plato de legumbres cocinadas con algo de cebolla y ajo, acompañadas de arroz blanco, resulta bueno, barato y tiene todos los nutrientes esenciales.

- También he redescubierto la pasta. Creo que los últimos años comía pasta demasiado buena.

- Hay mucha gente dispuesta a invitarme. Practico con las notas mentales. Algún día devolveré favores.

- He estado en Suiza. Sin la crisis no sé si lo hubiera hecho...

- He conocido a personas que de otro modo no hubiera conocido. Siempre es algo interesante conocer personas nuevas, aunque sea con un trato breve. Más información para analizar al ser humano.

- He aprendido que se puede aguantar mucho más de lo que parece. Esto más o menos lo sabía, ahora he descubierto otros niveles a los que se puede aplicar.

- He aprendido que no te cortan el agua cuando solo debes una factura. De ahí deduzco que con otras facturas no pasa lo mismo. Espero no tener que llegar a comprobarlo.

- Sí, la filosofía de vida importa más allá de lo inmediato. La frase de "no te tomarías las cosas así si.." puede estar totalmente equivocada. Supongo que una vez asumes que te va a tocar vivir pidiendo dinero a todo el mundo solo para ir tirando, puedes vivir con ello sin amargarte y tratando de ser feliz igual.

- Me he reafirmado en que lo importante para ser feliz tiene muy poco que ver con el dinero. Es mucho más importante tener personas con las que puedas contar que tener una fuente de ingresos asegurada. (Aunque en cierto modo eso lo digo porque si tienes un grupo de gente con el que puedas contar, también tienes asegurada la subsistencia. Si dejara de cumplirse esa premisa, supongo que lo vería distinto.)

- He redescubierto el concepto de solidaridad. Creo que ahora lo entiendo mucho mejor.

- He aprendido que hay pocas cosas peores que sentirse inútil. Creo que para la mayoría de personas en el paro eso es lo peor.

No pretendo ni mucho menos decir que esta crisis (sigamos llamándola así) ha sido buena para mí. Espero que se entienda. También podría escribir las cosas malas que me ha aportado, pero prefiero ni planteármelo. Me canso de enfadarme. 

Quizá me ha quedado un poco demasiado personal. No sé. Supongo que quería plasmar mínimamente lo que está significando la situación global en mi vida particular. Una de tantas.

sábado, 27 de octubre de 2012

Modelos

Ayer estuve en un taller interesante. Aprendí una palabra nueva: demisexual (seguramente la había oído o leído, pero no llegué a procesar el concepto). Y me replanteé los modelos, desde un punto de vista de los modelos sociales.

Tanto como desde los distintos feminismos que conozco (y que tengo mezclados caóticamente dentro de mí), como desde cierto activismo Trans, y cierto activismo LGB+, se proponen muchos modelos distintos. Creo que hasta ahora no había caído en que realmente ninguno de ellos es el bueno y definitivo. Que con esos modelos sucede lo mismo que con los que se usan en física, química, ingeniería, etc. También cumplen la máxima de que son "falsos". Y sin embargo, útiles.

Ejemplo. Discutir si cuando dices hombre/mujer estás hablando de sexo o de género. Así de entrada, ese es un modelo donde ya existen de forma diferenciada el sexo y el género. Desde que aprendí ese concepto de género, como algo diferenciado del sexo, mentalmente pasé a considerar que mi modelo mental anterior (donde sexo y género eran lo mismo) era malo. Así, rotundamente.

Pero la cosa no queda ahí. Luego empiezan a entrar otras categorías. Cuando hablamos de Drag Queen o Drag King, ¿nos referimos a un género? ¿a un comportamiento? ¿En qué categoría está? O si hablamos de androginia, ¿se hace referencia al género, se hace referencia a rasgos visibles, estética pura y dura? ¿La palabra asexual debe estar en la misma categoría que gay?

En uno de los grupos llegamos a crear siete categorías distintas. Y aun así había palabras chirriando. ¿Es lo mismo hablar de homosexualidad que de ser gay o de ser lesbiana? ¿Y si usaramos palabras referidas al "objeto de deseo" (¿androfilia?) estaríamos hablando también de orientación sexual?

Y algo que alguna vez que la he comentado me ha llevado a recibir miradas "poco amables". ¿Puede mezclarse la identidad de género con la orientación sexual? O en otras palabras... Decir "soy lesbiana" ¿no tiene cierta componente de decir mi género no es el que se esperaba de mí? ¿Cuantos géneros deben crearse para clasificar a todo el mundo? ¿O solo deberíamos cargarnos el género? Y aquí otro componente, el temporal. Lo que usamos para definir el estado actual de la mentalidad popular, y lo que usaríamos en nuestro objetivo utópico. ¿Serviría la misma clasificación, el mismo modelo?

Y así se puede seguir hasta el infinito.... Modelos de varias dimensiones. Modelos cualitativos, modelos cuantitativos... (¿Qué porcentaje de hombre eres?) Preguntas en las etiquetas de las distintas categorías: ¿debemos hablar de orientación sexual, opción o condición?

Debajo de cada una de estas cuestiones subyace un apasionante debate político. Y ahora creo que cada uno de los modelos propuestos puede ser útil en un determinado momento para una determinada persona. Aunque luego deba romper también con ese esquema y redibujarlo desde cero. Cada rotura y reconstrucción es una oportunidad.

miércoles, 24 de octubre de 2012

Voces

Vuelvo con la música. He querido centrarme en lo que me transmiten las voces, especialmente las voces de mujeres, y olvidarme de las letras (que en muchos casos tienen cosas criticables). Es un poco frustrante ver que incluso cuando la cantante es una mujer, el resto del grupo o el resto de músicos, suelen ser hombres.

No son las únicas que escucho, pero son algunas de las que más transmiten, por lo menos para mí.

Empezando por casa, escucho a Silvia Pérez Cruz. Con ella me sucede algo curioso, me gusta mucho más cuando canta en catalán que en cualquier otro idioma.

Otra mujer con una voz increíble (quizá la más asombrosa como voz), Sinéad O'Connor, aunque por ahora, de todas las canciones que le he escuchado, solo esta me hace vibrar.

Sigo con The Cranberries. Esta es bastante ñoña, así que voy a poner otra como contrapunto.

Vuelvo un poco atrás en el tiempo y escucho a Janis Joplin. Pongamos también a Nina Simone.

Y a esa ángel llamada Joan Baez (en este caso es un concierto, me quedaría con Copper Kettle, aunque todas las canciones de esta mujer son increíbles).



De voces masculinas, me quedo claramente con la de Kurt Cobain.